Rent-a-Bull SA es una empresa fundada en 1995 dedicada al alquiler de toros para el servicio de rodeos de cría en la Argentina.
Mejora el manejo del campo, libera potreros para otras actividades productivas (p.ej. tener más vacas o hacer agricultura), es de menor costo que el servicio natural con toros propios y que la inseminación artificial, permite dimensionar cada año exactamente la cantidad y tipo de toros a utilizar, facilita programas de cruzamiento, disminuye riesgos del personal e instalaciones, permite obtener beneficios impositivos y mas…
Porque es la empresa fundadora y líder del sistema de alquiler de toros en la Argentina, sumando clientes y experiencia desde hace más de 20 años, alquilando anualmente 1000 toros de diferentes razas por temporada de servicios con todas las garantías zootécnicas, genéticas y sanitarias.
Porque es la única empresa cuya actividad principal es alquilar toros, cuidando todos los detalles del servicio que presta y contando con el mejor equipo profesional y de logística.
Por eso si elige alquilar toros hágalo con Rent a Bull SA… que por algo se llama así
Ingeniero Zootecnista (UNLZ), Doctor en Ciencias Agrarias (Universidad Goettingen - Alemania), especialista en mejoramiento bovino. Presidente de Rent-a-Bull S.A. Co-Director de Rent a Bull Uruguay.
Ingeniero en Producción Agropecuaria (UCA), productor agropecuario en Trenque Lauquen, cabañero de las razas bovinas Shorthorn y Angus, ex Presidente de la Asociación Argentina de Criadores de Shorthorn, ex Presidente de la Cámara Argentina de Productores de Carne Vacuna. Director de Rent-a-Bull S.A.
Ingeniero Zootecnista (UNLZ), investigador y docente universitario en genética y mejoramiento animal, asesor en producción agropecuaria. Director de Rent-a-Bull S.A.
Técnico agropecuario. Coordinador general de centros de distribución ("Guarderías") de toros.
Médico Veterinario (UdelaR), Egresado de Maestría en Producción Animal y Agro negocios (Fagro). Director de Rent-a-Bull Uruguay.
Encargado campo "La Muñeca" de Coronel Pringles, provincia de Buenos Aires.
Rent-a-Bull fue fundada en 1995 en Argentina por profesionales y productores agropecuarios, en virtud de interpretar la necesidad de los productores de contar con una alternativa de servicio que permita mejorar el manejo del campo, con igual eficacia que el servicio natural y a un costo competitivo.
El servicio que ofrecemos se enmarca en una estrategia económica moderna de especialización productiva y aumento de la escala en cada componente de la producción.
En 2000, Rent-a-Bull S.A. fué premiada en el marco del Premio al Emprendedor Agropecuario, otorgado por el Banco Francés, en la categoría "Emprendimientos en los que se manifieste ingeniosidad empresaria"
Nuestra propuesta despertó el interés de numerosos medios informativos del sector y del sector ganadero (ver nota de La Nación 2013), transformándose prontamente en una realidad productiva e insertando a Rent-a-Bull entre los mayores proveedores de toros en la Argentina.
En 2018 comenzamos a operar en Uruguay con socios locales.
Celo diario
Calculadora de toros
Mejora significativamente el manejo del campo, ya que desaparece una categoría por demás problemática y exigente en forraje, cuidado y costo sanitario, evitando además servicios por "robo", rotura de instalaciones, pozos y topadas.
Permite utilizar la superficie liberada de toros para otras actividades productivas (agregar más vacas, agricultura, otras).
Se dimensiona exactamente cada año la necesidad de toros y su tipo (para vacas, para vaquillonas, diferentes razas) de tal forma que nunca sobran toros ante cambios de planteos o eventos climáticos.
Permite renovar la "sangre" del rodeo cada vez que se desee, adaptar cada temporada el tipo de ternero a producir e implementar programas de cruzamiento sistemáticos sin costo incremental por el cambio de toros de rutina en dichas acciones o programas.
El sistema es particularmente útil para repasar el rodeo luego de Planteos de Inseminación Artificial, abaratando el costo por vaca preñada, mejorando la eficiencia reproductiva del rodeo y eliminando la categoría “toro” durante su período improductivo.
MENOR COSTO QUE LAS DEMAS ALTERNATIVAS (servicio natural con toros propios o inseminación artificial) para toros de idéntico valor comercial. Ver información detallada en "Costos Comparativos”.
Impositivamente el costo del alquiler se deduce INTEGRAMENTE como gasto, y además evita pagar impuestos al patrimonio (renta presunta o bienes personales) ya que no incluye los toros en el patrimonio.
Por que con nuestros toros y nuestra empresa?
Rent-a-Bull es la única empresa local que se dedica como actividad principal a alquilar toros. Por eso le alquila lo mejor, y no lo que no puede vender o "lo que hay".
Tenemos independencia de las Cabañas proveedoras y dentro de una amplia oferta de toros de diferentes razas y líneas genéticas, seleccionamos para Ud. lo que mejor se adapta a su requerimiento. No le proveemos "lo que hay" sino "lo que necesita".
Nuestros toros son probados en su eficiencia reproductiva y controlados en su aptitud productiva, y el usuario cuenta con datos objetivos sobre la misma.
Ejercemos un muy estricto control sanitario de los toros. Nuestros toros trabajan solo una temporada al año, y es posible reservarlos para más de una temporada para uso exclusivo.
Contará con asesoramiento gratuito por parte de profesionales en mejoramiento animal, acerca de las mejores opciones para su establecimiento.
Categoría | Costo del alquiler por toro / temporada |
---|---|
Standard |
Precio 450 kg. |
Choice |
Precio 480 kg. |
Super |
Precio 520 kg. |
Premium |
Precio > 600 kg. |
• IMPORTANTE
En todos los casos la empresa elige los toros en cabañas que ofrecen una sanidad y genética confiables y manejadas con un criterio a satisfacción de Rent-a-Bull. Asimismo Rent-a-Bull elige dentro de las cabañas proveedoras el material a incorporar al sistema. Las tropas de toros se "arman" con fines específicos, en un todo de acuerdo con la necesidad de cada cliente (cruzamientos, mejoramiento, servicio de vaquillonas de 15 meses y otras).
• PRECIOS
Los precios son orientativos y corresponden al equivalente en pesos de la cantidad de kilogramos indicados para cada categoría de toros, calculados tomando el promedio de precios por kilo de los novillos “Esp. jóven +430” y novillitos “Esp. h390” y “Esp +390” en el Mercado Agroganadero de Cañuelas de la semana anterior a la fecha de pago (se publica a diario en el sitio de internet www.mercadoagroganadero.com.ar). No incluyen IVA ni flete. Financiación: A convenir.
• SEGURO OBLIGATORIO
Incluye franquicia total para el locatario si devuelve toros estropeados o enfermos y parcial (cantidad a definir) por muerte de los mismos durante el período de alquiler. El locador asume la pérdida patrimonial pero no se obliga a reemplazar las bajas durante el servicio.
• FLETES
Por cuenta y cargo del locatario o por cuenta de Rent a Bull con cargo parcial al locatario (traslado compartido).
Con lo mismo que Ud. gasta el comprar cada toro, le proponemos alquilarlo, y con la plata que le sobre podrá:
A) Comprar dos vacas para ocupar el campo liberado de toros ( = mas terneros)
B) Hacer agricultura en el potrero de los toros ( = mas rentabilidad por Ha.)
¡Cualquier alternativa de uso del suelo es MÁS NEGOCIO que tener los toros ocupando campo y condicionando la rotación de la ganadera!.
Con nuestro sistema además de aumentar sus ingresos ahorrará gastos y pérdidas asociados a los toros (sanidad, servicios por robo, roturas de instalaciones, pozos, riesgos del personal, encierres y otros).
A continuación se comparan las siguientes opciones:
1. Servicio natural con toros comprados
2. Inseminación artificial a tiempo fijo
El costo del servicio con toros comprados, y a los efectos de poder compararlo con otras alternativas como el alquiler de toros o la IATF, está compuesto por la amortización e intereses, el costo de oportunidad del espacio ocupado por los toros durante el período de descanso y por otros costos de mantenimiento de los toros (sanidad y varios).
La amortización de los toros surge de la diferencia entre el valor de compra y el valor residual de venta, dividida por los años de uso PROMEDIO de los toros. Para el cálculo de la duración media de los toros en servicio deben tomarse las bajas por edad o diente, y las que ocurren por motivos funcionales, físicos o sanitarios.
Cuadro 1. Datos de base para el cálculo de vida útil de los toros | ||||
Temporadas de servicios | Cantidad de toros en uso | Bajas por diferentes motivos físicos entre servicios | Bajas por Muerte | Remanente |
---|---|---|---|---|
1 | 100 | 15 (15 % al primer año) | 2 | 85 |
2 | 83 | 10 (12 % en años subsiguientes) | 2 | 71 |
3 | 71 | 8 | 2 | 61 |
4 | 61 | 7 | 2 | 52 |
5 | 52 | 6 | 1 | 45 |
6 | 45 | --- | 1 | 0 |
PROMEDIO PONDERADO DE VIDA UTIL = 3,04 TEMPORADAS |
El promedio de vida útil puede corroborarse tomando como modelo un rodeo estabilizado y suponiendo que los toros se utilizan un máximo de 5 temporadas de servicio, 20% de los mismos se dan de baja cada año por viejos y un 10-15% por otros motivos (lesiones, ojos, sanidad, estado corporal, pezuñas, quebraduras, etc.), lo cual hace que se descarten mas de un 30% anual promedio.
Cuadro 2. El valor de la cuota de amortización e intereses en relación al valor de compra (kg.nov./TORO) | ||||||
Valor de compra | Gastos de compra (7%) | Costo total de compra (A) | Recupero valor carne (-10% gtos. - 10% mort.) (B) | Amortización en 3 temporadas (C)=(A-B) / 3 | Interés al capital inmovilizado (D)=(A-B) x7% | Amortización Mas intereses (E)=(C+D) |
---|---|---|---|---|---|---|
1000 | 70 | 1070 | 330 | 247 | 51 | 298 |
1200 | 84 | 1284 | 330 | 318 | 66 | 384 |
1400 | 98 | 1498 | 330 | 389 | 81 | 470 |
NOTAS: En “B” se asume que los toros de descarte (a la salida del servicio) pesan unos 600 kg. que valen por 400 kg. de novillo, y que hay 10% de bajas y 10% de gastos de comercialización (de allí salen los 330 kg. del cuadro). Es posible engordar aún mas los toros de refugo previo a su venta. En ese caso hay que descontar del valor de venta el costo de engordarlos. En “D” se toma un interés de SOLO 7%, que se trata de una tasa pasiva. En este punto, si la empresa tiene deudas de cualquier tipo habría que tomar una tasa activa de mercado.
Cuadro 3. Costo de sanidad de los toros -anual, base 15 toros- | |
RUBRO | COSTO (en kg.) |
---|---|
Honorarios veterinarios –revisación, sangrado, 2 raspajes a 10 kg./revisación y 5 kg./raspaje. | 20 |
Gastos de laboratorio (Vibriosis x 2, Tricomonas x 2, Brucelosis x 1, TBC x 1) | 12 |
Movilidad veterinario (2 viajes x 100 km.). | 4 |
Vacunas + antiparasitario | 6 |
TOTAL | 42 |
En éste punto pueden tomarse diferentes criterios de cálculo según cada establecimiento. El caso mas sencillo es en campos de cría pura, donde puede realizarse el siguiente cálculo: Un toro, consume forraje como 1,4 a 1,7 vacas (en rigor EV), pero como normalmente la carga animal se ajusta a la categoría vaca y los toros usualmente “subpastorean” holgadamente en uno o mas potreros, puede decirse que cada toro ocupa al menos el lugar de dos vacas (en algunos campos mas aún, y esto sin evaluar de que manera los toros condicionan la rotación de potreros de las otras categorías, especialmente las hembras sin servicio). De esta forma el campo pierde de producir casi dos terneros, es decir unos 300 kilos, comparativamente a la alternativa de alquilar los toros. Otra forma de evaluar el “lucro cesante” es en el caso frecuente que el “potrero de los toros” es el mejor del campo y tiene aptitud agrícola, cuanto rendiría esa superficie afectándola a la agricultura. Puede tomarse un valor de referencia del costo de mantenimiento del orden de como mínimo 200 kg. entre las variantes enunciadas.
Existen otros costos no cuantificados en este artículo como ser : Rotura de instalaciones y pasturas (postes, alambres, pozos, etc.), daño por servicios “por robo”, perjuicio en la rotación de potreros para evitar esos servicios “por robo” (imposibilidad de uso de potreros contiguos al de los toros para hembras sin servicio), accidentes de trabajo del personal y uno muy importante que es el dimensionamiento de la cantidad y tipo de toros a utilizar, ya que es común que en los establecimiento varíe la cantidad de vientres, o la decisión de entorar o no vaquillonas, que hace que a veces faltan toros y a veces sobren, mientras que con el sistema de alquiler siempre están en la cantidad y función justa. Cada productor puede estimar en su caso que valor le da a éstos rubros.
Cuadro 4. Síntesis del costo/toro/año | ||||||
Rubro | COSTO/TORO/AÑO (en Kg. de novillo) | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
Valor de compra 1000 kg. |
Valor de compra 1200 kg. |
Valor de compra 1400 kg. |
||||
Cuota de amortización + intereses | 298 | 384 | 470 | |||
Alimentación o lucro cesante | 200 | 200 | 200 | |||
Sanidad | 42 | 42 | 42 | |||
Imprevistos y otros | ... | ... | ... | |||
Total/toro/año | >530 | >626 | >712 |
En el cuadro 5 se muestra como el costo del servicio por vaca servida y vaca preñada (se asume un 90% de % de preñez) en relación al valor de compra de los toros, y el % de toros en servicio.
Cuadro 5. Síntesis del costo por vaca servida / preñada con toros de diferente valor a diferente % de toros. | |||||||
VALOR DE COMPRA | COSTO/TORO/AÑO | Toros 2,50% | Toros 3,00% | Toros 4,00% | |||
---|---|---|---|---|---|---|---|
Kg. 1000 | 530 | 13,2 | 14,5 | 15,9 | 17,5 | 21,2 | 23,3 |
Kg. 1200 | 626 | 15,6 | 17,2 | 18,8 | 20,7 | 25,0 | 27,5 |
Kg. 1400 | 712 | 17,8 | 19,6 | 21,4 | 23,5 | 28,5 | 31,3 |
De la información expuesta se concluye que el costo anual por toro excede el equivalente en pesos de 530 kilogramos de novillo, y utilizándolos al 3% de toros en servicio daría un costo por ternero de 16 kilos de novillo o más.
Precio aproximado por vientre a inseminar incluyendo hormonas y sincronización (U$S 13), semen (U$S 5), movilidad (U$S 2), varios (U$S 1)= U$S 21 / vientre inseminado (equivalentes a unos 13 kilos de novillo/novillito por vientre inseminado).
Si se calcula que por esta vía se preña un 50% de los vientres inseminados, se llega a un costo por preñez de U$S 42 (equivalentes a unos 26 kilos de novillo/novillito por vientre preñado) quedando aún por resolver la preñez de las vacías de éste lote más la de los vientres que por estado no ingresaron al programa de inseminación.
La cantidad de toros necesaria para el repaso se calcula en mayor porcentaje que lo habitual en servicio natural, porque las vacías de la IATF se alzarán todas alrededor de los 21 días de inseminadas y los toros se verán sobre-exigidos en corto tiempo. Por eso se calcula en 5% sobre las que teóricamente quedan vacías de la IATF o bien el 2,5% del total.
Cada vacía de la IATF exige entonces el equivalente a 28 kilogramos adicionales para el repaso (ver costo del servicio natural, cuadro 5).
Costo combinado IATF mas repaso con toros CADA 100 vacas
Costo de la IATF = equivalente a 1300 kilogramos de novillo
Costo del repaso = equivalente a 1400 kilogramos de novillo
Costo total aprox. = equivalente a 2700 kilogramos de novillo
Suponiendo una preñez final entre IATF y repaso de toros del 85%, cuesta el equivalente a 32 kilogramos de novillo por vaca preñada.
Como se hace para alquilar los toros?
1) Comuníquese con nosotros para acordar la raza, la cantidad de toros, etc.
2) Nos envía los datos necesarios para confeccionar un contrato.
3) Firmamos un contrato que fija las condiciones (fecha del servicio, precio, forma de pago, etc.)
4) Luego nosotros nos ocupamos de enviar y retirar los toros de su campo.
Que pasa si uno o mas toros mueren o se estropean durante el servicio?
El contrato otorga al locatario una franquicia de 3% por muerte, porcentaje considerado normal y dentro del cual el locatario no deberá abonar compensación alguna al locador. En porcentajes superiores el locatario deberá compensar al locador con una suma correspondiente a la diferencia entre el costo de un reproductor en el mercado y el importe abonado en concepto de locación.
La inutilización de reproductores que pueda ocurrir durante el período de locación está en un 100% franquiciada a favor del locatario, es decir que en ese caso no deberá abonar punitorio ni compensación alguna al locador. El locador no se hace responsable de la reposición/sustitución de los reproductores muertos/inutilizados. Por esa razón cualquier reposición/sustitución que deba realizarse se considerará como una nueva operación. A modo de ejemplo comparativo entre el sistema de compra y el de alquiler obsérvese lo siguiente:
Al igual que en el sistema convencional de compra de reproductores, las bajas por muerte o inutilización traen aparejadas dos consecuencias:
a) Eventual necesidad de reposición/sustitución de el/los reproductores dados de baja.
b) Pérdida de capital total (muerte) o parcial (inutilización: valor carne vs. valor como reproductor)
La consecuencia descripta en "a" afectará exclusivamente al comprador o locatario. Ni los vendedores ni los locadores se obligan a reemplazar un toro que va a venta o alquiler en perfectas condiciones físico-sanitarias, ya que es absolutamente normal que ocurran bajas durante el servicio sin distinción entre ambas modalidades comerciales. Por otra parte normalmente no ocurren todas las bajas al inicio del servicio sino a lo largo del mismo con lo cual se van compensando las bajas que puedan ocurrir con una menor cantidad de hembras ciclando por la preñez que se va obteniendo a lo largo del servicio. Si ocurre un porcentaje extraordinario de bajas es inevitable en ambos sistemas realizar la reposición que corresponda.
La consecuencia descripta en "b" en un sistema de compra da lugar a pérdidas exclusivamente para el comprador y ninguna al vendedor. Por el contrario, en el sistema de alquiler da lugar a pérdidas solo al locador, ya que el locatario solo abonará indemnizaciones en porcentajes extraordinarios de muertes de reproductores.
Que pasa si un toro no trabaja?
Normalmente la empresa trabaja con toros probados en relación a su capacidad de servicio. Aún en caso que no lo fueran, es prácticamente imposibe determinar durante el servicio si un toro en particular trabaja o no trabaja. Lo que normalmente ocurre es que los toros trabajan de acuerdo al orden social que ellos mismos determinan, por el cual habrá dominadores que estén mayor tiempo activos, y dominados que estarán mas apartados… esperando su oportunidad, o trabajando de noche!
En nuestra experiencia y con mas de 10.000 toros alquilados nos ha pasado varias veces que nos llamen para señalarnos que no se ve trabajar a los toros. En ninguno de esos casos hubo mermas de preñez (en uno de esos rodeos, de 500 vacas tuvimos un 98,5% de preñez sin ver NUNCA trabajar un toro), y lo atribuimos a que algunas tropas trabajan de noche … y a que el miedo a lo desconocido -los toros alquilados- hace ver fantasmas a la paisanada!
A la fecha, Rent-a-Bull S.A. opera en la región pampeana en Argentina y en Uruguay, desde varios centros que denominados "Guarderías de Toros", que son los campos donde los toros se concentran entre temporadas de servicios (primavera de cada año), y donde recuperan estado corporal y son revisados por nuestros veterinarios.
La empresa (en Argentina) se desenvuelve desde guarderías ubicadas en Cañuelas, Coronel Pringles y Huinca Renancó.
Tratar de no introducir a servicio toros vírgenes con toros de mayor edad: Los toros de mayor edad dominan a los vírgenes y éstos no trabajan o lo hacen menos que lo necesario y esperado. Mucha gente cree que no es tan así. Eso ocurre porque como normalmente se trabaja con un mayor porcentaje de toros que el necesario, aún cuando solo trabajen bien los adultos el porcentaje de preñez es adecuado. Este fenómeno solo será visible o comprobable en resultados (preñeces) cuando se introducen a servicio uno o pocos toros adultos con muchos vírgenes, ya que los adultos no dejan trabajar a los vírgenes ni llegan a cubrir satisfactoriamente las vacas en servicio.
No hacer rotación de toros en servicio: La rotación de los toros en servicio es una práctica tan errónea como difundida. Cada “rotación” exige en la tropa de toros un desgaste para redefinir el “orden social”, que les consume energía y los hace “perder celos”. Lo recomendable es iniciar el servicio con un % normal de toros y a medida que avanzan las preñeces y cor consiguiente baja el % de vacas que ciclan ir sacando toros de a poco para que no queden peleando varios por una vaca alzada. Una salvedad a esta recomendación es que debe aplicarse cuando el celo inicial es normal (no menos de 3% diario). En casos que por diferentes factores (sequía, falta de comida, otros) el estado de las vacas provoca que el celo inicial es muy bajo y la temporada de servicio deba consecuentemente alargarse, puede decidirse iniciar el servicio con una parte de los toros y luego cambiar los que peor estén (una sola “rotación”).
Si no es necesario, evitar “completar” la cantidad de toros cuando ocurren bajas durante el servicio.
Suponiendo que se está dando servicio a 300 vacas con 9 toros, es de esperar que a la semana de iniciado el servicio un 15-20% de las vacas estén preñadas, y a las tres semanas aproximadamente la mitad lo esté. Por eso, y para evitar el mismo efecto que en la rotación de toros, es prudente analizar la necesidad de reemplazar aquellos toros que salen de servicio. Normalmente, si se inicia con un % algo “holgado” no es necesario efectuar reemplazos, ya que por ejemplo el 3% de toros con que se inicia es un 6% sobre las vacas vacías a las tres semanas de iniciado el servicio. En ese caso, tendrían que salir de servicio 5 de los 9 toros en 21 días de servicio para pensar en introducir otros toros. Evitar trabajar con rodeos demasiado chicos. Hay veces que el servicio falla en rodeos chicos, porque si por ejemplo en un rodeo de 60 vacas con dos toros (un toro cada 30 vacas) uno falla por cualquier motivo, solo queda un toro apto para 60 vientres, en cambio, con el mismo porcentaje de toros o aún menos, por ejemplo en un rodeo de 300 vacas con 9 toros, es muy improbable que fallen tantos toros como para dejar el lote con una relación 1 toro : 60 vacas ya que para ello tendrían que fallar 4 toros. En caso de rodeos chicos es entonces recomendable no trabajar con bajo porcentaje de toros o tener un seguimiento muy de cerca.
En campos “difíciles”, es muy recomendable tender a manejar el servicio en potreros chicos, planos y despejados, con lo cual se favorece el encuentro toro-vaca y el control del servicio por parte del personal del campo, y permite reducir los % de toros en servicio con lo cual se ahorrarán costos significativamente.
En muchos casos, es posible controlar como va el servicio y darse tiempo de descubrir posibles fallas y solucionarlas, a los efectos de no llevarse ingratas sorpresas al momento del tacto, donde ya nada puede remediarse. La mejor forma de hacerlo NO ES juzgar si los toros trabajan o no trabajan SINO “contando celos” (durante tres días consecutivos en lotes grandes y mas días en lotes chicos –solo la que se deja montar-), por ejemplo, desde los 25 días de iniciado el servicio. La cantidad de celos observado, nos darán una idea de la cantidad de vacas aún no preñadas, en una proporción 1:20 a 1:30 (variará de acuerdo al ancestro inicial), y por diferencia las ya preñadas. Si bien nos dará solo una estimación, ésta es ilustrativa de si algo anda mal o todo ocurre de acuerdo a lo esperado. Es mejor cuando las vacas están identificadas individualmente ya que en caso contrario se puede contar una misma vaca un día y al siguiente como vaca en celo (solo debe contarse una vez).
Introducción:
La heterosis es el fenómeno genético que ocasiona el denominado "vigor híbrido", el cual es aprovechado en la mayoría de las especies de interés productivo, tanto animal como vegetal, donde en general prácticamente no existe producción comercial con razas o líneas puras. La práctica de combinar selección con cruzamientos, curiosamente no es tan utilizada en el caso de los bovinos aunque está fehacientemente demostrada su gran utilidad y validez en esta especie.
La heterosis y el consiguiente vigor híbrido nos resultan de utilidad para mejorar los índices de las características productivas más importantes, y como ventaja adicional puede decirse que se trata de LA UNICA TECNOLOGIA DE COSTO CERO EN GANADERIA.
Situación genética general:
En general los campos de cría de la región pampeana trabajan con razas puras británicas o sus cruzas, y en caso de aplicarse cruzamientos se hacen de forma relativamente desorganizada.
Situación de manejo mas común:
Pastoreo rotativo con mayor o menor intensificación.
Posibilidad y decisión de dar servicio en más de un lote.
Objetivo del programa de cruzamientos:
Maximizar el potencial genético de producción de carne del rodeo de cría, en el medioambiente productivo existente -alimentario, sanitario, etc. y dando lugar a un producto de máxima aceptación en el mercado.
Bases técnicas de la propuesta:
• Se aprovechan las múltiples ventajas del vigor híbrido (heterosis) materno e individual, mediante cruzamientos programados, sin complicar significativamente el manejo del campo.
• La reposición se realiza con hacienda propia, seleccionando por indicadores de fertilidad y conformación.
• Se minimiza el riesgo de pérdidas de terneros y vientres por problemas de distocia.
• Se tiende a producir lotes uniformes de terneros/novillos para venta.
• De las múltiples variantes de cruzamientos posibles, se escogen los cruzamientos rotativos (criss-cross) como los mas fácilmente aplicables y de mejor resultado práctico.
Conceptos genéticos relevantes en el manejo de cruzamientos:
• El aprovechamiento del vigor híbrido mediante esquemas de cruzamientos es mucho mas efectivo para producir carne que la mejor selección -por mas exigente que sea- dentro de una raza pura.
• En la cría a su vez es mas determinante en la productividad global del rodeo (kgs./ha. producidos) el vigor híbrido de los vientres que el de sus crías.
• Es deseable que los toros sean de raza pura para: a) evitar "segregación" genética, que provoca dispersión fenotípica en las crías -desuniformidad de lotes- y b) mantener coadaptación genética en las crías -un filamento de ADN coadaptado, de raza pura y su homólogo híbrido-.
Los modelos mas recomendables:
Cruzamiento rotativo entre dos razas
Se trabaja con dos razas A y B.
El sistema se estabiliza en prácticamente tres generaciones con dos rodeos de diferente constitución genética: Un rodeo "a" de vientres cruza 2/3 A 1/3 B y un rodeo "b" de vientres cruza 1/3 A y 2/3 B.
El rodeo "a" se sirve con toros B y el "b" con toros A.
Una vez estabilizado el sistema, las crías producidas por el rodeo "a" servido por B, van a resultar del genotipo del rodeo "b", por lo cual las hembras seleccionadas servirán de reposición del rodeo "b" y los machos se destinan al engorde o venta.
Las crías producidas por el rodeo "b" y servidas por A, van a resultar del genotipo del rodeo "a", por lo cual las hembras seleccionadas servirán de reposición del rodeo "a" y los machos se destinan al engorde o venta.
En la práctica, si se tiene un rodeo de una sola raza, por ejemplo Angus, todas las vacas existentes harán las veces de rodeo "a" y se sirven desde este año y hasta el fin de su vida útil por la raza B (la raza B podría ser Polled Hereford o Shorthorn).
Las hijas media sangre de este rodeo pasan a "fundar" del rodeo "b", que será servido por toros Angus. Su descendencia pasa como reposición del rodeo "a" y así sucesivamente hasta la estabilización de los genotipos de los rodeos "a" y "b".
Cruzamiento rotativo entre tres razas
Se trabaja con tres razas A, B y C, por ejemplo Angus (AA), Polled Hereford (PH) y Shorthorn (Sh).
El sistema se estabiliza en tres generaciones con tres rodeos de diferente constitución genética: Un rodeo "a" con vientres con "mayoría de sangre Angus", segundo Shorthorn y tercero Hereford, esquemáticamente representado será 58% AA, 28% Sh y 14% PH; un segundo rodeo "b" 58% Sh, 28% PH y 14% AA y un tercer rodeo "c" 58% PH, 28% AA y 14% Sh.
El rodeo "a" se sirve con toros PH, el "b" con toros AA y el "c" con toros Sh.
Una vez estabilizado el sistema, las crías producidas por el rodeo "a" van a resultar del genotipo del rodeo "c", por lo cual las hembras seleccionadas servirán de reposición del mismo y los machos se destinan al engorde o venta.
Las crías resultantes del rodeo "b" serán del genotipo "a", por lo cual las hembras repondrán el mismo, y las del rodeo "c" serán de genotipo "b", el cual repondrán.
Generalidades
Si bien cada rodeo producirá un genotipo de terneros diferente al otro, los fenotipos serán muy similares en relación a la estructura corporal y de excelente valor comercial.
El proceso es lento ya que las generaciones se cumplen "con los vientres nuevos producidos" y no con las vacas hoy existentes, que serán mantenidas normalmente hasta el final de su vida útil.
La separación de los rodeos "a" y "b" y eventualmente "c" solo debe hacerse en términos reales durante la época de servicios. Durante el resto del año todas las vacas pueden permanecer juntas.
Es importante que toda la ternera hembra se marque a fuego (del lado del lazo) según el genotipo del rodeo al cual irá a reponer.
CONSULTE POR UN PROGRAMA ESPECÍFICAMENTE ADAPTADO A SU ESTABLECIMIENTO
El servicio de las vaquillonas es todo un tema, especialmente si se pretende aumentar la eficiencia del stock implementando el entore precoz. El entore precoz (a los 15 meses de edad) tiene ventajas y limitaciones muy conocidas desde el punto de vista productivo, y también son bastante conocidas las alternativas de servicio de 22 y 27 meses. Sin embargo es oportuno especialmente para el primer caso realizar algunos comentarios sobre aspectos no siempre tenidos en cuenta.
1- Prestar atención al desarrollo de las vaquillonas
Es absolutamente recomendable el pesaje de las vaquillonas previo a la decisión de incluirlas o no en el lote a servicio. Sin embargo no solo deben ser pesadas sino también observadas, ya que además del peso mínimo tienen que estar desarrolladas normalmente. En la práctica resulta mejor entorar una vaquillona de 300 kgs. en un estado corporal bueno que otra de igual kilaje muy chica y gorda, ya que es de esperar que la primera "levante kilos" y continúe desarrollando mejor que la segunda. Esta recomendación no implica coincidir necesariamente con una práctica observada frecuentemente, como es vender las vaquillonas gordas a mercado y entorar las flacas (independientemente del desarrollo que tengan), ya que esta práctica conduce a seleccionar indiscriminadamente en contra del engrasamiento y en favor del aumento de tamaño.
2- Priorizar la vaquillona y no el ternero a lograr
Nunca las vaquillonas van a dar terneros tan buenos como los de las vacas, porque su habilidad materna es peor y su producción de leche menor. Si además queremos que lo produzcan precozmente menos aún. Solo que este ternero adicional será "gratis" y "…a caballo regalado…". En la práctica tenemos que priorizar que no ocurran excesiva cantidad de partos distócicos, que convierten la técnica del entore precoz en muy desgastante y desmoralizante para el personal, y en antieconómica, por la pérdida inmediata de terneros y vaquillonas, y las pérdidas a futuro por el menor rendimiento que tendrán las vaquillonas que sufrieron durante el primer parto. Un ternero grande en el primer parto, aún cuando no produzca distocia es malo, si pensamos cuanto mas le "exige" a éste vientre -aún en crecimiento- un ternero grande al pie que uno mas chico (por ejemplo un cruza Criollo o Angus de bajo peso).
3- Prestar atención a los toros a utilizar
La elección de los toros a utilizar tiene que ser muy calculada, en función del desarrollo de las vaquillonas al momento del entore y el esperado para los nueve meses siguientes. En general, podemos ordenar las razas de los toros por dificultad de parto creciente como sigue:
Sin dificultad: Jersey - Criolla (aunque el cruza Criolla es mejor ternero que el cruza Jersey). La utilización de estas razas es especialmente recomendable cuando el peso de entore está muy cerca del límite, o para servir a la "cola" del lote de vaquillonas, o cuando se duda sobre la disponibilidad de abundante y buen forraje en los meses siguientes al servicio.
Poca dificultad: A. Angus de bajo peso de nacimiento (actualmente también existen líneas de Hereford de bajo peso de nacimiento. Son recomendables para vaquillonas bien desarrolladas y con buen pronóstico forrajero.
Mediana dificultad: A. Angus y Hereford convencionales -de tipo antiguo-. No son recomendables para vaquillonas. De ser utilizados solo pueden serlo en vaquillonas de 27 meses.
Alta dificultad: Británicas "new type" y continentales. No aptos para vaquillonas.
Para utilizar toros británicos de bajo peso de nacimiento es necesario tener en cuenta tres factores:
1. El peso de nacimiento del toro elegido.
2. El peso medio de nacimiento de los machos en la cabaña de origen (es mucho mas confiable un toro de 32 kgs. de Peso de Nacimiento -PN-, proveniente de una cabaña con peso medio de 30 kgs. y poca variación, que otro toro con 31 kgs. de PN proveniente de una cabaña con peso medio mayor y mas variable).
3. La confiabilidad de las mediciones que realiza la cabaña proveedora, ya que en muchos casos se dice que son para vaquillonas y luego al parto vemos que no...
Conclusión:
PARA QUE EL SERVICIO DE VAQUILLONAS TENGA UN BUEN RESULTADO DEBE ATENDERSE SU PESO Y DESARROLLO, PRIORIZAR EL VIENTRE AL TERNERO Y PRESTAR ATENCION A LA RAZA Y TIPO DE TOROS A UTILIZAR EN CADA CASO.
Desde el inicio de la empresa sufrimos el dilema de entregar los toros en óptima condición para el servicio o en óptima condición para la vista, y elegimos la primera porque nos da resultados mas duraderos.
Comprendemos que a la vista, se ven más lindos los toros obesos (tipo toro de exposición y también los de la mayoría de los remates de Cabaña) que los de óptima condición para el servicio (criados y mantenidos en condiciones similares a las del servicio, es decir a pasto, donde por supuesto no engrasan tanto).
Los toros gordos tienen cantidad de problemas entre otros menor cantidad y calidad de semen porque se produce engrasamiento escrotal que impide regular bien la temperatura de los testículos, menor capacidad de desplazamiento y aumento de la frecuencia respiratoria (agitación), problemas de pezuñas (laminitis) por el excesivo consumo de granos, pérdida brusca de peso por cambio de dieta que impacta sobre su vitalidad general y la calidad de semen, mayor diferencia de peso sobre la vaca servida que lo normal y mayor peso sobre los garrones en el acto de monta.
Esta demostrado en cambio que los toros mantenidos a pasto (condición corporal intermedia) son los que dan mejores resultados reproductivos. Así en general no pierden peso durante el servicio de primavera a diferencia de los toros comprados gordos que pierden hasta 100 kilos en un período de servicio y luego cuesta mantenerlos en buen estado durante el invierno. En servicio de invierno es más probable que pierdan peso (en todos los casos pero mas en toros que entran gordos) por la menor calidad y disponibilidad forrajera amen de mayor humedad y menor temperatura (menor confort térmico). No es aconsejable ni útil que los toros entren gordos y salgan flacos del servicio sino que se mantengan lo mejor posible.
De todos modos es mas apropiado hablar en términos técnicos que con conceptos de “flaco” o “gordo”, y para ello existen escalas de medición de la condición corporal.
La bibliografía muestra que la proporción de toros sin líbido sexual es muy baja. Luego existen toros de baja, media y alta capacidad de servicio, siempre medida a corral, que tiene una correlación bastante alta con la capacidad a campo (ver trabajos de Mike Blockey) y además es un carácter muy heredable (ver trabajo propio C.A.Rodríguez y R.D.Martínez (1994): "Capacidad de Servicio y Circunferencia Escrotal: Su aplicación práctica en la mejora genética de rodeos de cría". Therios vol. 23. p.371-377).
Sin embargo, el servicio colectivo (varios toros en servicio en el mismo lote) es un acto colectivo como su nombre lo indica y se evalúa como tal, ya que no necesariamente suma las aptitudes individuales de cada toro, sin que por eso dejen de observarse situaciones particulares como mal comportamiento (p. ej. toros que topan a otros que sirven), quebraduras de pene y otras. La bibliografía muestra a través de estudios de ADN que la cantidad de descendientes de cada toro dentro de un lote en servicio colectivo tiene una componente muy importante de comportamiento (por dominancia). Así, como puede observarse en los cuadros adjuntos, es posible que un toro que cuando joven solo producía un pequeño porcentaje de los descendientes, en años posteriores cuando dejaba de ser dominado producía la mayor parte de las crías. También es normal y habitual que como indica en el primer cuadro, en un servicio donde hay por ejemplo siete toros trabajando, tres de ellos sean padres de mas del 80% de las crías, y aún que algunos no lo sean de ninguna (hay veces que se ven tan dominados que se apartan todo el tiempo sin que esto implique que el toro no tenga líbido). Estos factores no se pueden evitar, son del comportamiento habitual de la especie, y lo que ocurre en la práctica en el campo es una “compensación” de los mas con los menos y de allí surge el porcentaje recomendado de servicio.
A eso se suma que el observador pretende “ver” el trabajo de los toros. Ni los toros “trabajan” todo el tiempo y menos aún cuando se los perturba, ni al mismo horario. Nos ha pasado mas de una vez que nos indiquen que “no ven” a los toros trabajar y luego las preñeces son altas, hasta del 97% (Julián Iribarne, comunicación personal). También casos de alarmas porque los toros no trabajan y cuando uno va a atender el reclamo observa que ya no hay celos (porque están preñadas), y otras tantas anécdotas.
Por eso la mejor forma de evaluar el avance del servicio NO ES juzgar a simple vista si los toros trabajan o no trabajan SINO “contando celos” (durante tres días consecutivos en lotes grandes y mas días en lotes chicos –solo la que se deja montar-), por ejemplo, desde los 25 días de iniciado el servicio. La cantidad de celos observados, nos darán una idea de la cantidad de vacas aún no preñadas, en una proporción 1:20 a 1:30 (variará de acuerdo al anestro inicial), y por diferencia las ya preñadas. Si bien nos dará solo una estimación, ésta es ilustrativa de si algo anda mal o todo ocurre de acuerdo a lo esperado. Es mejor cuando las vacas están identificadas individualmente ya que en caso contrario se puede contar una misma vaca un día y al siguiente como vaca en celo (solo debe contarse una vez).
En el caso de vaquillonas de primer servicio es muy sencillo hacer la estimación ya que puede suponerse que empezaron con al menos 4% de celo diario y que los toros preñaron alrededor de un 3% diario. Si el servicio va bien, puede constatarse con el simple hecho de contar celos como fue indicado (ya que solo se alzan un porcentaje de las vacías). Una vez pasado el tiempo de un ciclo estral -21 días- y midiendo por ejemplo al día 25 de iniciado el servicio, debería haber un celo diario correspondiente al 5% de las aún no preñadas, es decir no mas de 2% diario (insisto en vaquillonas de primer servicio). Al día 45 después de iniciado el servicio (pasados dos ciclos estrales mas algún desvío) el celo debería ser menor del 1% diario.
Cuando el celo es mucho mayor en momentos que ya debiera haberse aplacado, las causas más probables son la de una enfermedad venérea (fundamentalmente Tricomonas) o que se inició el servicio con poco porcentaje ciclando.
Así es posible estimar antes del tacto como va avanzando la concreción de preñeces y con ello el trabajo de los toros a partir de un hecho concreto y no de supuestos.
COMPORTAMIENTO Y MANEJO | |||||
---|---|---|---|---|---|
Rango social | Pasturas | ||||
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | |
Toro 1 | 30% | 34% | 44% | 92% | 75% |
Toro 2 | 21% | 29% | 19% | 4% | 25% |
Toro 3 | 16% | 21% | 16% | 4% | 0% |
Toro 4 | 10% | 9% | 4% | ||
Toro 5 | 9% | 5% | 4% | ||
Toro 6 | 9% | 1% | 4% | ||
Toro 7 | 5% | 1% | 3% | ||
Toro 8 | 3% | ||||
Toro 9 | 3% | ||||
Toro 10 | 0% | ||||
N° de terneros nacidos | 73 | 64 | 43 | 28 | 32 |
COMPORTAMIENTO Y MANEJO | |||||
---|---|---|---|---|---|
Toro | % de terneros producidos por cada toro en | ||||
1964 | 1965 | 1966 | 1967 | 1968 | |
A | 70,4% (10) | 76,0% (11) | 12,2% (12) | ||
B | 16,7% (4) | 18,0% (5) | 63,4% (6) | 72,5% (7) | 25,1% (8) |
C | 7,4% (3) | 6,0% (4) | 12,2% (5) | 12,5% (6) | 62,5% (7) |
D | 5,5% (2) | 12,2% (4) | 15,0% (5) | 12,4% (6) | |
( ): Edad del toro en años. |
LA NACION 02/02/2013
Rent a Bull alquila 800 reproductores a 70 criadores; el sistema asegura mayor eficiencia, aunque genera polémica frente al manejo tradicional.
Por Fernando Bertello - LA NACION
En acción. Alejandro Rodríguez y Héctor Mario Eyherabide, en los corrales de una de sus tres guarderías para toros, en San Vicente. Las otras sedes están en Huinca Renancó y Coronel Pringles. Foto: Martin Felipe / AFV
SAN VICENTE.- Una graciosa historieta en su página de Internet invita a romper el paradigma: que el productor ganadero, en vez de comprar los toros para dar servicio, directamente los alquile.
"Pasemos una temporada juntos, después te vas a tu casa y basta de complicaciones!", son las frases que, en un diálogo simulado de unas vacas con un toro, se leen en la web de Rent a Bull, una empresa que desde 1995 se dedica a alquilar reproductores machos. Lo hacen con las razas británicas Angus, Hereford y Shorthorn.
Los números son sorprendentes: la firma empezó alquilando 30 toros por año y hoy ya está en los 800. Tiene unos 70 clientes, muchos de ellos que acompañan desde el inicio mismo este "sistema", imitado de un modelo de los Estados Unidos.
Precisamente, de "sistema" hablan Héctor Mario Eyherabide y Alejandro Rodríguez, integrantes de Rent a Bull. Es que ellos son quienes adquieren los reproductores a cabañas y otros proveedores [salvo en Shorthorn, que abastece a la empresa el mismo Eyherabide con su cabaña "Santa Cecilia", y en toros Angus para vaquillonas de 15 meses, que produce la sociedad] según las necesidades de sus clientes.
Para esos toros hay precios de alquiler de acuerdo con la calidad y categoría. A modo de ejemplo, el costo por temporada de un toro "standard" (definido como novillero de buena calidad para ser usado en vacas generales) ronda los 480 kilos de novillo. El precio incluye un seguro de muerte e inutilización del reproductor, otorgado por la misma empresa.
Además, armaron una logística para abastecer desde tres campos, ubicados en San Vicente, Coronel Pringles y Huinca Renancó (Córdoba) a los clientes.
Esos establecimientos funcionan como "guarderías" cuando los reproductores vuelven a trabajar de los servicios a campo. Se van acopiando en un proceso que termina a fines de febrero. Luego, una vez allí, se llevan adelante controles sanitarios (desparasitado, raspajes y algún tratamiento de ojo de ser necesario), los animales se separan y preparan por edades (los más adultos van a lugares más rústicos y los jóvenes a praderas mejores) y se hacen los descartes.
Entre el descarte que se da por edad y por algún problema allí están en un descarte del 30% por año. Normalmente los toros no se usan más de 4 campañas y el promedio trabajando a campo da 3,3 campañas. Nunca los toros van de campo a campo, es decir, de un servicio a otro. En general se mantienen los mismos toros a los mismos clientes, a los que se les suman los nuevos tras los descartes.
Ahora el productor tiene la posibilidad de alquilar toros para los servicios en sus establecimientos.
"El productor que se decide por este sistema tiene que romper con el paradigma de ir a comprar los remates", dijo Rodríguez.
Según este empresario, la gente que hace el cambio es quien el toro más le molesta. Y eso pasa, en su opinión, más en los campos mixtos. "Son los casos en que molestan por la ocupación de superficie, porque no se pueden poner categorías de hembras jóvenes cerca de los toros o quizás tienen que mantener un potrero agrícola de 20 hectáreas para tener unos 6 toros todo el año", expresó.
Si bien un toro consume 1,6 equivalente vaca, casi siempre usa más superficie y subpastorea. "Tomando un destete de 85% y un mínimo de 1,6 EV nos da que dejamos de producir 1,36 ternero en el espacio que ocupan los toros, es decir, unos 250 kilos de ternero que equivalen a unos 280-300 kilos de novillo", señalan.
En este contexto, en la firma dicen que hay un "lucro cesante" para quienes tienen un toro todo el año para usarlo sólo tres meses o menos. "Muchas veces el productor ve que por cada toro produce dos terneros menos. Es decir, por cada toro podría tener dos vacas y producir dos terneros más. Hay un lucro cesante de tener el toro todo el año y esto va más allá del costo sanitario, los riesgos para el personal (por accidentes), los alambres (roturas), etcétera", indicó Rodríguez. Los toros que tienen en la empresa llegan con la información que proveen las cabañas. No reciben ración y permanecen con la condición a campo para que no sufran cambios cuando deban ir a trabajar.
Según Eyherabide, el 90% de los clientes son estables y no llega al 5% el número de quienes vienen a ver los toros previamente. "Confían en el ojo de Rodríguez, que es quien determina lo que el cliente le dice que necesita", señaló Eyherabide. Rodríguez es un zootecnista y conoce a Eyherabide desde antes del inicio de esta experiencia.
Por lo pronto, en esta firma dicen que sus clientes son más clientes del sistema que de la genética.
"Los clientes les prestan más atención a que el toro sea bueno y les de el servicio que pretende. Son clientes del sistema más que de la genética, porque a la genética la compramos hecha al gusto del cliente; sabemos el toro que le gusta", dice Rodríguez.
En rigor, aquí dicen que "se identifica el gusto" y se arma "la genética adaptada" para sus clientes.
SAN VICENTE.- En Rent a Bull tienen calculados los costos del servicio natural con toros comprados y el realizado con toros alquilados.
Para el caso de la compra, calcularon que si el productor trabaja con 4% de toros en servicio, cada 100 vacas tiene cuatro toros con el siguiente costo anual. Repone un toro cada año a un costo del equivalente en pesos de, por ejemplo, 1200 kilos de novillo. Luego recupera el valor de 400 kg de novillo con el toro vendido de desecho, con lo cual tiene un costo neto de reposición de 800 kg./año. Pero, además, como cada toro come por una vaca y media, deja de producir aproximadamente 5-6 terneros, que equivalen al valor de 1000 kg de novillo.
Por otra parte, de sanidad gasta aproximadamente 200 kg en total entre vacunas, raspajes, laboratorio, honorarios y movilidad del veterinario. Al final de las cuentas, según la empresa, comprando los toros, entre lucro cesante y gasto corriente gasta el equivalente de aproximadamente 2000 kg de novillo/año por cada 100 vacas.
Por el contrario, según cuentan en la firma, con el sistema de alquiler utilizaría para las mismas vacas tres toros de 480 a 540 kg de novillo cada uno, es decir, el equivalente en pesos de 1440/1620 kilos de novillo. De esta manera, con estos números sale más barato este sistema.
"Además, como impositivamente es un gasto, deduce de Ganancias la alícuota que le corresponda, por ejemplo 35% en sociedades, con lo cual reduce el costo real de servir las 100 vacas a casi la mitad de lo que le cuesta comprando los toros", señaló Alejandro Rodríguez, de Rent a Bull.
Si se compara contra la inseminación artificial a tiempo fijo (IATF), en la empresa dicen "que el costo por vaca a servir es similar, sólo que con servicio natural a igual costo preñará el doble que IATF, con lo cual el costo por vaca preñada se reduce a la mitad".
"El sistema ya está probado y no hay ninguna duda de su eficiencia. Nosotros podríamos crecer en la pampa húmeda, pero necesitaríamos otra estructura", concluyó Héctor Eyherabide.
SAN VICENTE.- Si bien el costo de un toro "standard" ronda los 480 kilos de alquiler por temporada, también hay toros de otras categorías que cuestan más. "Los clientes habituales trabajan en un rango de alquiler de entre 480 y 600 kilos (de costo)", precisó Alejandro Rodríguez, de la firma Rent a Bull. En pesos, se trata de entre 4400 a 5500, siempre según la categoría.
Según Rodríguez, el servicio natural con toros alquilados se ubica en torno de un 30% más barato que el servicio natural con la compra del toro (ver aparte).
"El criador hace la cuenta de lo que cuesta comprar y amortizar. Si hace esa cuenta, el alquiler puede parecer caro. Pero si a la compra le suma el resto de los costos, como los terneros que no produce, la sanidad, la subocupación de potreros o el costo de oportunidad porque podría tener más soja o vacas, el costo de servicio natural con compra da 30% por encima del costo del alquiler", indicó Rodríguez.
En la empresa dicen que la inseminación tiene un costo similar a este sistema de alquiler. No obstante, destacan en la empresa que con el servicio natural se logra más preñez. Así, a igual costo se preña más con el servicio natural alquilado.
Por lo pronto, en la empresa buscan estar atentos a una serie de factores que aseguren la satisfacción de los clientes. "Los toros deben responder a las expectativas de los productores", indicó Héctor Eyherabide, integrante de la firma.